Frena en seco
Hey mates!
Me apetecía hablaros de algo distinto a lo que podemos encontrar en Brisbane o Australia en general. Quería dedicar un post a esta necesidad por escribir que tengo en ocasiones. Escribir como manera de evadirme.
¿Alguna vez os habéis dedicado tiempo? Pero no hablo de cantidad, sino de calidad. Tiempo para decirte "frena y escúchate", ¿cuál ha sido tu camino hasta ahora?, ¿quieres seguir en él?, ¿qué tienes? y sobretodo... ¿qué quieres?
Si os soy sincera creo que hasta hace unos días no lo había pensado nunca. Estaba tan influenciada por mi entorno y sumergida en mi rutina, que no me había parado a pensar qué es lo que realmente quería. Ahora que lo veo algo más claro, siento como que he estado flotando y dejándome llevar por un río (entiéndose como mi zona de confort) que ya tenía un camino hecho y prestablecido. Y lo peor de todo, sin pensar si ese río me gustaba, si quería seguir flotando y dejarme llevar por él. En un momento de mi vida, decidí pararme a mitad de camino y dedicarme aquello que nunca había hecho, tiempo.
Mi mayor parada en el camino fué venirme a Australia. Fue la respuesta a la gran necesidad que tenía en aquel entonces. Y a decir verdad, cada día salgo del camino. Está claro que cada momento compartido significa multiplicar la felicidad x1000... Pero, tengo la necesidad de dedicarme un rato para mí diario, para saber si lo que he hecho hoy me lleva donde quiero llegar mañana. Que no hay dos días igual, no hay dos 3 de febrero de 2019, no hay ningún viaje igual, no hay dos años que celebres los 47 años de tu madre, no hay dos cafés en una terraza de un chino iguales, no hay ningún momento que pueda repetirse... ¡Cada instante es único!
Cuando pasaban los días desde que llegué a Australia, pude ver que uno de mis mayores problemas, era la rutina y monotonía. Hay que conseguir hacer que cada día sea diferente, todos tenemos una rutina y está en nuestras manos hacer que cada día sea distinto. No dejéis que la rutina se convierta en monotonía, porque tengo claro que por muy difícil que sea, yo no dejaré que sea así nunca más. Dicen que de todo se aprende, así que gracias a mi error de convertir cada día en el mismo día durante meses y meses, di el salto. Así que, no está tan mal. Este mismo error me hizo irme al culo del mundo.
¡VIDA SOLO HAY UNA SEÑORES!
Lo dicho, aprovechar cada instante como si fuera el último y...
¡Nos vemos en Australia! 🇦🇺
Me apetecía hablaros de algo distinto a lo que podemos encontrar en Brisbane o Australia en general. Quería dedicar un post a esta necesidad por escribir que tengo en ocasiones. Escribir como manera de evadirme.
¿Alguna vez os habéis dedicado tiempo? Pero no hablo de cantidad, sino de calidad. Tiempo para decirte "frena y escúchate", ¿cuál ha sido tu camino hasta ahora?, ¿quieres seguir en él?, ¿qué tienes? y sobretodo... ¿qué quieres?
Si os soy sincera creo que hasta hace unos días no lo había pensado nunca. Estaba tan influenciada por mi entorno y sumergida en mi rutina, que no me había parado a pensar qué es lo que realmente quería. Ahora que lo veo algo más claro, siento como que he estado flotando y dejándome llevar por un río (entiéndose como mi zona de confort) que ya tenía un camino hecho y prestablecido. Y lo peor de todo, sin pensar si ese río me gustaba, si quería seguir flotando y dejarme llevar por él. En un momento de mi vida, decidí pararme a mitad de camino y dedicarme aquello que nunca había hecho, tiempo.
Mi mayor parada en el camino fué venirme a Australia. Fue la respuesta a la gran necesidad que tenía en aquel entonces. Y a decir verdad, cada día salgo del camino. Está claro que cada momento compartido significa multiplicar la felicidad x1000... Pero, tengo la necesidad de dedicarme un rato para mí diario, para saber si lo que he hecho hoy me lleva donde quiero llegar mañana. Que no hay dos días igual, no hay dos 3 de febrero de 2019, no hay ningún viaje igual, no hay dos años que celebres los 47 años de tu madre, no hay dos cafés en una terraza de un chino iguales, no hay ningún momento que pueda repetirse... ¡Cada instante es único!
¿Mi consejo?
No dejes escapar ni un momento, que todo lo que pasa... Sucede una vez y nunca más.
Cuando pasaban los días desde que llegué a Australia, pude ver que uno de mis mayores problemas, era la rutina y monotonía. Hay que conseguir hacer que cada día sea diferente, todos tenemos una rutina y está en nuestras manos hacer que cada día sea distinto. No dejéis que la rutina se convierta en monotonía, porque tengo claro que por muy difícil que sea, yo no dejaré que sea así nunca más. Dicen que de todo se aprende, así que gracias a mi error de convertir cada día en el mismo día durante meses y meses, di el salto. Así que, no está tan mal. Este mismo error me hizo irme al culo del mundo.
¡VIDA SOLO HAY UNA SEÑORES!
Lo dicho, aprovechar cada instante como si fuera el último y...
¡Nos vemos en Australia! 🇦🇺
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| Daisy Hill Road, Queensland, Australia |
Me encanta ��
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